La frecuencia con la que te lavas el cabello debe basarse en la cantidad de aceite que produce tu cuero cabelludo.
Cuando te laves el cabello, concéntrate en limpiar principalmente el cuero cabelludo en lugar de lavar todo el cabello. Lavarte solo el cabello puede crear un cabello suelto y sin brillo.
El uso de un acondicionador puede mejorar significativamente el aspecto del cabello dañado o degradado al aumentar el brillo, disminuir la electricidad estática, mejorar la fuerza y ofrecer cierta protección contra los dañinos rayos UV.
Solo debes usarlo de medios a puntas del cabello y no en el cuero cabelludo.
Por ejemplo, si te tiñes el cabello, usa un champú diseñado para cabello teñido.
Cuida tu cabello de los efectos dañinos del cloro, humedeciéndolo y acondicionándolo antes de nadar. Usa un gorro de natación ajustado, un champú formulado y un acondicionador profundo después de nadar para reemplazar la humedad perdida.
Si tienes preguntas sobre el cuidado de tu cabello consulta con tu dermatólogo.